La enfermedad de Chagas, transmitida por el Triatoma dimidiata conocida como chinche picuda o besucona, representa una seria amenaza para la salud en el país. Según la Organización Panamericana de la Salud -OPS-, la enfermedad es endémica en 21 países de las Américas, afectando a cerca de 70 millones de personas en riesgo de infección.
En Guatemala, los departamentos más vulnerables son Chiquimula, Jutiapa, Jalapa, Zacapa, Quiche, Santa Rosa, Alta Verapaz, Baja Verapaz, Huehuetenango, El Progreso, Guatemala y Petén.
Estas regiones presentan las condiciones ambientales que favorecen la proliferación de las chinches portadoras del parásito Trypanosoma cruzi, causante de la enfermedad.
“La enfermedad de Chagas se presenta cuando la chinche pica a una persona o animal infectado y luego pica a una persona sana. Al depositar sus heces infectadas con el parásito Trypanosoma cruzi, en heridas de la piel o sobre mucosas, la víctima al rascarse puede introducir el parásito en su sangre, comenzando la enfermedad”, explicó Lcda. Lilian Amiel, encargada del Subprograma Chagas, del Programa de Enfermedades Transmitidas por Vectores, del Ministerio de Salud Pública y Asistencia Social –MSPAS-.
Asimismo, la enfermedad de Chagas puede permanecer asintomática durante años o décadas y presenta dos fases principales. La fase aguda, que dura de 1 a 60 días, en donde el 10% de los casos confirmados presentan síntomas como fiebre, vómitos, inflamación de ganglios, hinchazón en el lugar de la picadura llamado Chagoma y el signo de Romaña, que es la inflamación del músculo ocular, el otro 90% de los casos son asintomáticos.
La fase crónica, que se presenta después de los 60 días, incluye síntomas como signos de insuficiencia cardíaca congénita y arritmias, palpitaciones, edema en los miembros inferiores y alteraciones digestivas.
Esta última puede causar daños severos en el corazón, el esófago y el colon, con consecuencias mortales. Por ello, es crucial detectar y tratar la enfermedad en su etapa aguda durante los primeros 60 días para prevenir complicaciones.
Por otro lado, la mayoría de las chinches se encuentran en las grietas de las viviendas, colchones, muebles, material de construcción y una limpieza deficiente. Las casas con menor riesgo son aquellas sin grietas, con piso de cemento o loza y sin animales dentro.
La prevención se centra en mejorar las condiciones de vivienda para evitar la presencia de chinches, así como en realizar tamizajes (pruebas de laboratorio) en las comunidades endémicas.
El MSPAS ofrece pruebas para la detección temprana de la enfermedad de Chagas y tratamiento médico, recomendando a quienes viven en zonas endémicas, mujeres embarazadas, personas que presenten síntomas o sospecha de la enfermedad, acudir al servicio de salud más cercano.
#SaludParaTodos #metroredes
Post Views: 89