mrsadmin
Con una serie de señalamientos de pagos a empresas vinculadas al caso “mecanismo de corrupción MICIVI y caso B410”, Rafael Curruchiche, jefe de la Fiscalía Especial Conta la Corrupción, FECI, dijo en conferencia de prensa que se ha solicitado antejuicio contra el presidente Bernardo Arévalo por usurpación de funciones y abuso de autoridad, mientras que el gobierno responde que estos actores no tienen ninguna credibilidad y los disparates de Curruchiche no tienen cabida en ninguna acción jurídica, menos en un antejuicio.
Según la FECI el mandatario ordenó de manera ilegal, realizar pagos a empresas que están vinculadas al caso mecanismo de corrupción y al caso B410 que el mismo presidente dijo que era el mayor fraude de la historia en nuestro país.
En la conferencia participó el secretario general, Ángel Pineda; el jefe de la Fiscalía Especial contra la Impunidad, Rafael Curruchiche; y el jefe de la Fiscalía contra la Corrupción, Miguel Vásquez.
En sus declaraciones Curruchiche, refiriéndose al presidente de la República, Bernardo Arévalo, lo señaló de ser el “principal responsable de fomentar la impunidad”.
Según Curruchiche, Arévalo habría emitido una orden ilegal con la creación de un mecanismo de pago arbitrario fuera del marco de sus funciones y atribuciones establecidas en la Constitución.
El fiscal Curruchiche indica que Arévalo autorizó ilícitamente con su firma pagos a contratistas del Estado, a favor de “contratistas contratados por el Micivi”.
En su presentación, Curruchiche presentó la llamada grabada entre el presidente Arévalo y la exministra de Comunicaciones, Jazmín de la Vega, cuando le comunicó que sería removida del cargo.
El caso nació a raíz de una denuncia presentada por Ricardo Méndez Ruiz, de la Fundación Contra el Terrorismo (FCT), quien en su cuenta de X había mencionado que había presentado una solicitud de retiro de antejuicio contra el presidente Arévalo por los delitos de abuso de autoridad, violación a la Constitución y tráfico de influencias, “por pretender beneficiar a sus financistas de campaña”.
